El próximo lunes, día 16 de diciembre, estrenamos en Santiago de Compostela En deuda con todas, un documental social con un objetivo político: llamar la atención sobre la vulneración de derechos que sufren las mujeres salvadoreñas y contribuir, así, a la lucha de los colectivos feministas que -dentro del país centroamericano- exigen una legislación que no vulnere los derechos humanos de la mitad de la población y que garantice el acceso a una salud sexual y reproductiva libre de prejuicios ideológicos. Especialmente, para las niñas y las adolescentes más vulnerables. En los 60 minutos que dura la pieza audiovisual, el relato lo sostienen sus propias protagonistas, desde ambos lados de los muros de la cárcel, recordándole al mundo que despenalizar el aborto cuando la vida y la salud de la madre corren peligro es también una lucha por la vida.

En el documental se escuchan las voces de dos mujeres privadas de libertad, que hablan desde la cárcel, y de cuatro mujeres ex-privadas de libertad, que hablan desde el otro lado de los muros de la prisión sobre su compromiso con el activismo por la despenalización del aborto en el país. También de dos de las abogadas y de las responsables de los colectivos feministas que están luchando para que “Las 17 y más” recuperen su libertad, de un catedrático de Derecho Penal en la Universidad Centroamericana “José Simeón Cañas” y de dos diputadas de la Asamblea Legislativa de El Salvador, del FMLN y de ARENA. En deuda con todas también ofrece la opinión de la que fue durante cinco años coordinadora de la Unidad de Salud Sexual y Reproductiva del Ministerio de Salud de El Salvador, de una gineco obstetra de la Unión Médica por la Salud y la Vida de las Mujeres cuya propia vida corrió peligro por un embarazo ectópico y de la responsable de la Unidad de Atención a Niñas y Adolescentes embarazadas, que protagoniza uno de los momentos más esclarecedores del documental.

“El Estado salvadoreño”, recurda la ex-privada de libertad y activista Teodora Vásquez, “está endeudado con las mujeres de su país”. Y desde las ONGD gallegas AGARESO y ACPP -productoras del documental- añaden que quien, sabiéndolo, no exige el pago de esa deuda se convierte en cómplice. “Las niñas, las adolescentes y las mujeres salvadoreñas están en triple riesgo”, explican, “primero, de ser violadas, que su agresor quede impune y que la sociedad las juzgue a ellas; segundo, de ser obligadas a vivir embarazos y partos que pongan en riesgo su propia salud y maternidades a edades tan tempranas como los 10 o 12 años; y, finalmente, si algo sale mal durante el embarazo o el parto y sufren cualquier tipo de emergencia obstétrica extrahospitalaria las mujeres salvadoreñas sufren situaciones como las vividas por Las 17 y más, condenadas a décadas de prisión tras la muerte inesperada de sus bebés”.

Los responsables de En deuda con todas. Una historia sobre la penalización del aborto en El Salvador son el vigués Roi Guitián y la sevillana María Lobo, que contaron con el apoyo en la documentación y la producción ejecutiva de la lucense Sonia Díaz y la villagarciana Lorena Seijo. Las ONGDs gallegas AGARESO (Asociación Galega de Comunicación para o Cambio Social) y ACPP Galicia (Asemblea de Cooperación para a Paz) produjeron este documental con el apoyo financiero de la Xunta de Galicia, a través de Cooperación Galega, y con la colaboración de APROCSAL (Asociación de Promotores Comunales Salvadoreños), la Agrupación Ciudadana por la Despenalización del Aborto y la Colectiva Feminista para el Desarrollo Local.

En deuda con todas se estrenó el 19 de noviembre en San Salvador y se estrenará en España el 16 de diciembre, a las 19h30, en la sala Númax de Santiago de Compostela. La entrada será gratuíta, hasta completar aforo. A partir del mismo 16 de diciembre, la pieza está a disposición de todos aquellos colectivos que quieran organizar proyecciones y debates y muy pronto, advierten sus creadoras, estará también disponible para su visualización on-line, ya que el objetivo es contribuir a la incidencia política y social de los colectivos que luchan por los derechos de las mujeres salvadoreñas.