Coincidiendo con el estreno del IX Seminario de Comunicación Social y Cooperación Internacional, cerramos también el ciclo de la anterior edición. Hoy celebramos en el salón de actos de la Facultad de Filosofía de Santiago de Compostela la presentación del cortometraje documental Zanka Dialna (La calle es nuestra), un trabajo elaborado en terreno por los tres alumnos elegidos en la anterior edición de esta formación.
Marcos Fernández, Leticia Francisco y Uxía Pérez, acompañados de los voluntarios de AGARESO María Aneiros y Antonio Grunfeld, viajaron a Tánger el pasado mes de junio para sumergirse en una experiencia que supuso para ellos un auténtico aprendizaje tanto a nivel profesional como personal. Zanka Dialna es el fruto que presentan como resultado de ocho días de motivación y emoción a flor de piel ante la necesidad de gritar historias silenciadas. Un trabajo con un objetivo claro: presentar a una mujer marroquí privada de derechos que ahora alza la voz empoderada para defenderlos y recuperarlos.
Ante la mirada impaciente del público, los tres exalumnos expusieron un breve resumen de las sensaciones y aprendizajes adquiridas en Marruecos durante la semana de grabación. Una vez contextualizado el trabajo, la proyección envolvió a los asistentes en la atmósfera tangerina durante 25 minutos de pura intensidad, dolor, esperanza y lucha. Así lo describía una de las espectadoras: “Despois de vivir este pequeno baño de realidade doume conta de canto me fixo sentir e comprender. Canta impotencia, canta verdade e dor observei en aquelas miradas. Canta admiración por unhas mulleres tan loitadoras e que tanto teñen sufrido. O certo é que cheguei a sentirme pequena ao lado da súa valentía e ao mesmo tempo moi feliz por ter a oportunidade de coñecer e comprender as súas historias. ”
La buena acogida demostró que el mensaje que el cortometraje buscaba transmitir desde el otro lado del estrecho había llegado a su destino: el público. Todos los asistentes señalaron la valentía que demostraban las mujeres que luchan por cambiar las cosas, así como las dificultades que se viven en una realidad tan próxima y a la vez tan lejos de nosotros. Se interesaron, asimismo, por el proceso emocional que cada uno de los miembros del equipo había vivido a lo largo de su primera experiencia como portavoces de lo social, y como esto podía reflejase en el resultado. No faltaron tampoco los agradecimientos tanto por parte del público como de los protagonistas, los que no dudaron en dar las gracias por la asistencia y hacer mención especial a su coordinador: Antonio Grunfeld.